Las líneas más afectadas por el mal tiempo son las del norte penínsular: la transversal que une Galicia y toda la cornisa cantábrica con Barcelona, y las que enlazan a Madrid con las capitales del norte de España.

Concretamente en la noche del pasado sábado, la nieve provocó la caída de dos árboles sobre la infraestructurade la vía entre las estaciones de Inoso y Artomaña, en la línea Madrid-Bilbao. Este incidente afectó al talgo Madrid-Bilbao, que estuvo detenido en la estación de Izarra, hasta que las brigadas de trabajo pudieron cortar los árboles y arreglar los destrozos que habían causado en la vía.

Durante la pasada noche, también debido a la nieve acumulada, el tren regional Madrid-Palencia sufrió una avería en la estación de la Cañada (Avila). Los enclavamientos de la vía en esta estación quedaron fuera de servcio y esto provocó que los trenes estrella y los tren-hotel, que unen Madrid con el norte de la península acumularan retrasos.

Los más significativos se produjeron en los trenes Madrid-Ferrol, que acumuló unas tres horas de retraso; el Rías Gallegas, que une Madrid con La Coruña y Pontevedra, que circuló con unas dos horas de retraso; el Madrid-Santander, que también sufrió más de tres horas de demora; y el Gijón-País Vasco-Barcelona, que circuló con más de dos horas de retraso.