Como dato ilustrativo, Jesús Longueira señaló que la media daria de ventas en la lonja de Porto do Son ronda las 800.000 pesetas, mientras que "durante estos días la venta es cero". En la lonja de Aguiño, en el municipio coruñés de Ribeira, la venta habitual supera los dos millones diarios.

Los pescadores no perciben ningún salario fijo, sino que cobran tan sólo en función de las ventas, con lo que el último mes no han tenido ingresos. La legislación española no contempla ningún tipo de ayuda para los marineros ante situaciones de amarre prolongado por causas eteorológicas, por lo que según Jesús Longueira "no tenemos ninguna vía para solicitar ayudas".

En el sector marisquero, sólo en el banco de almejas de la villa pontevedresa de Carril se han perdido 300 millones por la muerte de bivalvos a causa del desmesurado incremento de agua dulce en la ría, al desembocar los ríos con el caudal crecido.

Las perspectivas para los próximos días apuntan a un mantenimiento del temporal, con mar muy gruesa y vientos superiores a los 80 kilómetros por hora, lo queobliga a mantener la actual situación de amarre.