Esta valoración en libros incluye todos los elementos patrimoniales y derechos transmitidos (licencias, marcas, ativos fijos mobiliarios e inmobiliarios, etc), cuyo valor de mercado ha sido certificado por KPMG Peat Marwick.

Además, serán transferidos unos pasivos de 68.000 millones de pesetas, con la misma proporción que la estructura financiera de Telefónica de España y al coste medio de su pasivo. Esta transferencia representa por tanto una aportación patrimonial neta de 59.000 millones, de los que 50.000 serán ampliación de capital y 9.000 prima de emisión.

Como consecuencia de esta operación, Telefónic Móviles dispondrá a finales de año de unos activos de 165.000 millones de pesetas, un capital social de 53.440 millones y unos fondos propios de más de 65.000 millones de pesetas.

El primer efecto de esta transferencia de activos lo notarán los clientes de servicios móviles de Telefónica a primeros del año próximo, ya que será la filial la que se hará cargo desde ese momento de la emisión de las facturas y que se pondrán al cobro a primeros de febrero.

A su vez, la transferencia incluye tanto elservicio digital GSM MoviStar, como el analógico, más conocido, MoviLine, que venía comercializando hasta ahora por encargo de Telefónica.

La operadora de móviles prevé concluir el año con medio millón de abonados más de los que tenía a comienzos de 1995, lo que representa un crecimiento del parque del 120%.