La nueva hoja de ruta de la teleco para los próximos años, denominada ‘plan GPS’ (por las siglas en inglés de Crecimiento, Rentabilidad y Sostenibilidad), prevé un alza del 5% de la caja operativa y por encima del 10% para la generación de flujo de caja, que crecerá desde los aproximadamente 4.000 millones de euros previstos en 2023 hasta los 5.000 millones de euros en 2026.

El 'GPS' de Telefónica también marca como meta que la deuda financiera neta, cifrada a cierre de septiembre en 26.537 millones de euros, se reduzca hasta una ratio de 2,2-2,5 veces/EbitdaAL en 2026.

En lo que se refiere al dividendo, los 30 céntimos anuales mínimos por título que promete el plan hasta 2026 serían la misma cifra abonada desde 2021. Previamente, el accionista obtuvo 40 céntimos en ejercicios inmediamente precedentes.

CINCO CLAVES DEL ‘GPS’

Telefónica sintetiza en cinco claves los ejes vertebradores del nuevo plan estratégico: sostenibilidad del crecimiento de los ingresos de particulares (B2C), mantenimiento del buen momento del negocio de empresas (B2B); evolución de los ingresos derivados de los acuerdos con los partners de la compañía; obtención de eficiencias que ayuden a reducir la estructura de costes, y reducción de la inversión, pero manteniendo el perfil diferencial de Telefónica en el sector.

En el segmento minorista, la tasa anual media de incremento de los ingresos entre 2023-2026 se espera que se coloque en el 1,5%, ritmo que en el caso del segmento empresarial (B2B) llegará al 5% para prolongar la favorable evolución que viene registrando en los últimos trimestres.

Por divisiones, Telefónica asegura que su unidad de servicios digitales, Telefónica Tech, que creó precisamente en el anterior plan estratégico de 2019, desempañará “un papel relevante” en los nuevos objetivos anunciados este miércoles. La compañía prevé que desde este año hasta 2026, registrará una tasa anual media de crecimiento del 18%, para terminar 2026 con unos ingresos de 3.000 millones de euros.

Telefónica Infra, otra unidad creada con el plan de 2019, llegará a 2026 con su huella de fibra hasta el hogar (FTTH) a aproximadamente los 30 millones de unidades inmobiliarias (UUII), frente a los 20 millones actuales. Este incremento contribuirá a que el volumen total de UUII pasadas con fibra hasta el hogar en el conjunto del grupo supere los 100 millones en 2026.

Aunque los objetivos para el próximo ejercicio se precisarán en febrero, Telefónica anticipa que la generación de caja libre crecerá en 2024 en torno al 10% y que las inversiones sobre ventas bajarán del 14%. Este escenario se basará tanto en la disminución de la intensidad de capital como en la ambición del grupo de aumentar los ingresos y el Ebitda.

La compañía asegura que atesora un balance sólido y una liquidez suficiente para cubrir el calendario de vencimientos existente en este momento. Al cierre del tercer trimestre, Telefónica cuenta con una posición de liquidez de 20.772 millones de euros, cuando los vencimientos acumulados en los tres próximos ejercicios se sitúan en los 10.300 millones de euros.

En clave de sostenibilidad, el 'GPS' de Telefónica hasta 206 indica la apuesta por “intensificar la colaboración con la industria teleco” con el fin de “liderar el proceso de lograr un entorno regulatorio más justo para el sector”. Además, Telefónica se mantiene firme en su objetivo de alcanzar emisiones netas cero en 2040, sobre la base de las renovables, la eficiencia y la circularidad. En cuanto a gobernanza, continuará fortaleciendo la compañía a través del compromiso de alcanzar paridad de género en los máximos órganos de gobierno en 2030.

El presidente de Telefónica, José María Álvarez-Pallete, aseguró que el ‘plan GPS’ es “la más valiosa herramienta de crecimiento y estabilidad de la compañía para encarar con éxito su centenario y seguir dando el mejor servicio”.

“Estamos en los albores de la era digital. En Telefónica, hemos llegado hasta aquí siendo fieles a nuestros valores y cumpliendo nuestros principales objetivos. La operadora se ha reinventado por completo porque la conectividad es la base de todo lo relacionado con lo digital. En Telefónica tenemos una nueva visión y ambición renovada para liderar el futuro, porque no somos sólo una compañía de telecomunicaciones, somos algo más grande y aun mejor. Ahora somos un supercomputador. En este nuevo mundo digital, el sector necesita urgentemente una completa desregulación. La mejor forma de garantizar la autonomía estratégica de Europa y del sector de las telecomunicaciones es un marco regulatorio adaptado a las necesidades de los nuevos tiempos”, añadió.