La compañía presidida por Luis Lada cuenta con una campaña que costará más de 600 millones de pesetas, según fuentes de la propia operadora consultadas por Servimedia, de los que la mayor parte se emplearán en una sucesión de anuncios televisivos que ya han empezado a pasarse por televisión.

Esta campaña de publicidad gira en torno a la idea del nacmiento de una estrella, y se quiere asociar al nombre -"MoviStar"- y logotipo del servicio GSM de Telefónica, que también es una estrella dorada.

Paralelamente, Telefónica ha empezado ya a "calentar motores" en toda su red comercial, con inicitivas de difusión del producto cuyo punto álgido será la convención de distribuidores que ha organizado para el fin de semana en Sevilla, en la que concentrará a más de 1.000 agentes oficiales para preparar la batalla comercial del "MoviStar" que tendrá lugar en toño.

Estas medidas no son diferentes a las que prepara Airtel, el competidor de Telefónica, aunque su decisión de salir el próximo día 3 de octubre, ha hecho que el lanzamiento no se haga en tanto el servicio no esté en la calle y listo para vederse al gran público, según fuentes del grupo consultadas por Servimedia.

La segunda parte de la "batalla" promocional del GSM, según ambos grupos, está prevista para finales de año, fechas en las que la proximidad de las fiestas navideñas impulsa las venas de terminales, líneas y conexiones al servicio.

En el centro de esta guerra, según las fuentes consultadas, está el interés de las dos operadoras por llegar a finales de año con la mayor porción del mercado GSM posible, dentro de las previsiones que se han manejado, y que se sitúan en torno a los 50.000 abonados.