Según los datos de la operadora, l balance de este primer año de competencia se ha saldado con un dato positivo, ya que su cuota en el emercado en competencia, el GSM, fue del 60%, pero también hubo otro negativo, puesto que el resultado antes de impuestos descendió de 23.181 millones de pesetas a 21.109 millones.

Este descenso, según explicaron a Servimedia portavoces de la compañía, refleja la agresividad comercial de la competencia y la política de subvención de terminales para atraer clientes, aparte del incremento de gastos de prsonal y amortizaciones que ha provocado la espectacular expansión del negocio a la que ha tenbido que hacer frente el sector.

En la actualidad, según Telefónica, se han superado ya los 2,5 millones de clientes, de los que un 60% están abonado a su servicio GSM.

Los responsables de la operadora señalan que, "si en 1996 las inversiones se elevaron a cerca de 140.000 millones de pesetas, en 1997 se invertirán otros 90.000 millones".

El objetivo de este desembolso es llegar a atender a finales e este año una cartera de tres millones de clientes, además de mantener la apuesta de crecimiento en el volumen de servicios y la mejora de la calidad.

Los ingresos de explotación de la operadora móviles en 1996 fueron de 258.906 millones de pesetas, frente a los 120.500 de 1995.