Juan Ramón García, delegado territorial de la ONCE, explicó hoy que, tras la reclamación, e taxista "se exaltó bastante y ante una nueva petición, empezaron los insultos, las descalificaciones y las amenazas de que se tenían que bajar del taxi".

Relató que ante la negativa de bajarse del vehículo, el taxista paró el vehículo "en el lado de la autovía y les obligó mediante empujones, tirones, e incluso algún puñetazo que otro, a bajarse del automóvil".

Los tres ciegos le dijeron al taxista que era plena noche y que no se les podía abandonar allí, a lo que éste le respondió que "hicieranlo que pudieran".

Cuando se dispusieron a llamar a la Policía con un teléfono móvil, el taxista huyó del lugar, no si antes decir a los ciegos que se encontraban en la autovía de Andalucía, cuando en realidad se encontraban en la de Alicante-Albacete.

La Policía tardó dos horas en localizar a los invidentes, ya que éstos no podían determinar el lugar exacto en donde habían sido abandonados. En la busqueda participaron tres coches de la Policía Nacional, dos de la Local, tres de la Guardia Civil yun coche de seguridad de la ONCE.

Por su parte, la ONCE ya ha puesto el asunto en manos de los abogados de la organización de ciegos para que estudien el caso. No obstante, a nivel personal, los afectados ya han presentado la correspondiente denuncia.