Para este año, la Comisión estableció que las universidades podían subir las matrículas en una horquilla del IPC (2 por ciento) más tres puntos, es decir, un aumento no superior al 5 por ciento en relación con el curo 1997-98.

El Gobierno y las comunidades confían en que se cumplan los objetivos oficiales de inflación para 1999 y ésta sea inferior al 2 por ciento.

En pesetas, una carrera media que el año pasado costaba 85.000 pesetas, este curso ha podido subir ente 1.500 y 4.000 pesetas. Esta banda que aprueba el Consejo de Universidades es formalmente sólo una recomendación, ya que son las comunidades autónomas las que determinan las tasas (el Gobierno sólo fija las de la UNED). No obstante, es habitual qu éstas se acomoden a lo que consensúa el Consejo.

Por otro lado, el próximo miércoles se reunirá también la Comisión Académica del Consejo de Universidades, que aprobará el número de plazas que se ofertarán en cada centro para el nuevo curso.