La tasa de seroconversión del personal sanitario madrileño inoculado accidentalmente se fija, de acuerdo con estos datos, en un 2,9 por mil casos.

Las tres seroconversiones se produjeron a consecuencia de un pinchazo en el área clínica de los hospitales. Parece comprobado que uno de estos casos ocurrió a las seis semanas del accidente, otro entre los 3 y los 5 meses y la tercera se detetó en el control del sexto mes.

La mayoría del personal que sufre accidentes con este material son enfermeros (61 por ciento) y el lugar más frecuente son se producen las inoculaciones es el área clínica de los hospitales (54 por ciento).

Respecto al tipo de accidentes, el 79 por ciento se produjeron por pinchazos y cortes con objetos infectados y el 20 por ciento son contactos con mucosas.

El registro regional estudia a los trabajadores sanitarios que ha sufrido una inoculación accidental cn material procedente de una fuente de contagio demostrada. El personal incluido en el registro pasa controles periódicos durante al menos 12 meses.

De los 1.547 accidentes registrados, 521 no concluyeron el seguimiento. El 47 por ciento sólo pasaron el primer control, el 21 por ciento pasaron el del primer trimestre y el 30 por ciento con el control de sexto mes realizado.