El Gobierno deciió en 2000 bajar un 9% la tarifa eléctrica entre 2001 y 2003, razón por la cual este año el recibo bajó un 4%. Sin embargo, el Gobierno ha anunciado que mantendrá congelada la tarifa en 2002, por lo que, para cumplir su promesa, debería reducir en un 5% el recibo en 2003.

Según Múgica, este anuncio del Ejecutivo es "una prueba más de hasta qué punto el Gobierno se alinea con los intereses de las grandes empresas; desgraciadamente estamos en manos de ya sabemos quién".

El presidente de la OCU resató que a esta congelación de las tarifas hay que añadir el fraude que se produce con los contadores, según denunció su organización la pasada semana, que supone un beneficio fraudulento para las eléctricas de 14.000 millones de pesetas.

"Estamos a un año de que podamos elegir libremente compañía eléctrica, pero todavía no hemos visto ningún movimiento" en este sentido, concluyó Múgica.