Por contra, la superficie aumenta en las viviendas unifamiliares, que ganan casi seis metros cuadrados, al pasar de 166,1 metros entre enero y septiembre de 2007 a 172 metros de este ejercicio.

Por otra parte, el tamaño de los pisos en bloque pasó de 96,8 en agosto de 2008 a 100,2 en septiembre, unos cinco metros más que en el mismo mes de 2007, y el mayor tamaño registrado en lo que va de ejercicio.

En el mismo sentido ha evolucionado la vivienda unifamiliar, pues en septiembre el tamaño medio de los pisos visados para construir fue de 170,6 metros cuadrados, frente a los 166,2 de agosto.

Remontándose a la serie histórica desde el año 2000, los datos revelan un descenso del tamaño medio de los pisos en bloque casi un 7% hasta 2007, mientras que éste creció un 15,5% en las viviendas unifamiliares.

De este modo, se pasó de 105,5 metros cuadrados en el año 2000 a los 98,3 de 2007 en las primeras, y de 145,1 a 167,6 en las unifamiliares.