El parlamentario, que solicitó más información sobre los daños ocasionados por la autovía al director de la Agencia de Medio Ambiente (AMA) en la comisión correspondiente de la Asamblea, indicó que los efectos medioambientales son "graves", ya que además de los pinos cortados, "miles y miles de otos árboles (carrascales, encinas, olivos y viñas) también han desaparecido".

José Luis Navarro precisó que la gran mayoría de los 4.300 pinos arrancados habían sido replantados hace más de 10 años por la extinta diputación provincial.

Otra de las pérdidas derivadas de las obras de la carretera de Valencia, a su paso por la localidad de Arganda, es la destrucción de muchos de los cerros, "que han sido arrasados por las máquinas", dijo el diputado.

Luis Maestre, director de la AMA, reconoció drante su comparecencia en la Comisión de Medio Ambiente de la Asamblea regional la tala de 4.300 pinos.

Asimismo, cifró en 1,27 millones de metros cúbicos el volumen de tierras extraídas para realizar las obras de la autovía de Levante en las cercanías de Arganda.

Otra de las cuestiones que Maestre tuvo que abordar en la comisión fue la enfermedad de las encinas del suroeste de la región. Explicó que en 10.000 hectáreas de esta zona, el 25 por ciento de ejemplares de esta especie arbórea están afctados por el microorganismo denominado "coleoptero coroebus bifasciatus".

El director de la AMA señaló que la única solución es cortar las ramas afectadas y quemarlas, operación que la agencia ha iniciado este mismo año de manera experimental.