En declaraciones a Servimedia, Hernández indicó que la medida que propone el Gobierno es "positiva", aunque consideró necesarias "campañas de sensibilización" en las empresas antes de imponerla, para intentar que se llegue a acuerdos entre fumadores y no fumadores y evitar así enfrentamientos.

En cuato a la posibilidad de promulgar un real decreto de prohibición del tabaco en el puesto de trabajo, la dirigente de UGT lamentó que no se haya consultado a los agentes sociales y pidió al Ministerio que les reúna antes de cerrar una normativa.

En este sentido, señaló que la norma "no deberá de ser ni demasiado cerrada ni demasiado abierta, porque provocaría conflictos entre los trabajadores dentro de la empresa".

A su juicio, "es un tema complicado" que requiere impulsar el debate en las empresasy en la sociedad para disminuir el consumo de tabaco y, si esto no da resultado, "le toca al Ministerio plantear sus medidas".