En un principio, los tres magistrados que componen el Tribunal propusieron que las partes fueran estudiando la nueva documentación aportada por las defensas según transcurre el juicio, de modo que barajaran la presentación de contrapruebas sobre la marcha. De esta manera, según el tribunal, se preservaba el principio de "igualdad de armas".

Sin embargo, el fiscal Fernando Burgos, que en un principio se había opuesto a la suspensión del juicio y apostaba por esta misma opción, cambió de opinión al considerar que esta actuación podría suponer una "escalada de prueba y contraprueba", que condicione el proceso.

El fiscal, que vela por el cumplimiento de la legalidad, pidió que se retrase el juicio hasta el lunes para que, ese día, las acusaciones propongan sus contrapruebas, y puedan preparar además sus interrogatorios respecto a la nueva prueba pericial, garantizando así una correcta instrucción.

La defensa de Botín presentó hoy una nueva prueba pericial en la que, supuestamente, se demuestra que los pagos a Amusátegui y Corcóstegui no supusieron perjuicio al banco ni a los accionistas.

La nueva prueba consiste en un informe elaborado por el catedrático y experto en gobierno corporativo, Manuel Olivenza, en el que se demuestra supuestamente que los pagos no perjudicaron al banco ni a sus accionistas.