Godó, que en la actualidad cumple condena por su pertenencia a la banda terrorista catalana Terra Lliure, fue juzgado ayer, miércoles, en la misma sala junto a Nuria Cadenas y Jordi Petit como autor de otros cuatro atentados llevados a cabo en Barcelona entre los años 1987 y 1988.

En esta ocasión el procesado es acusado de partiipar junto a otras dos personas en enero de 1988 en el atraco a una juguetería de Barcelona en el que consiguieron un botín de 97.000 pesetas.

Según las conclusiones del fiscal, los tres individuos fueron perseguidos por el sobrino del propietario del comercio asaltado, al que dispararon sin llegar a alcanzarle.

El testigo pudo observar cómo los atracadores se subieron a un taxi conducido por Miguel Muñoz (otro de los testigos que no compareció en la vista), tras lo que llamó a la policía.

U radiopatrulla policial interceptó el automóvil al que en numerosas ocasiones dio orden de detenerse, pero, según el mismo relato, Godó y sus compañeros comenzaron a disparar contra sus perseguidores y finalmente consiguieron darse a la fuga.

En el interior del taxi, la policía encontró varios casquillos de bala que un mes más tarde resultaron corresponder a las armas intervenidas a tres individuos que fueron detenidos por su relación con Terra Lliure y Guillermo Godó, arrestado en la misma operación,pero en un lugar diferente.

El juicio ha sido pospuesto hasta el próximo día 27 de cotubre para el que se volverán a citar a los testigos que hoy no se personaron en la Audiencia y cuyo testimonio es imprescindible para el esclarecimiento de los hechos, según el ministerio fiscal.