EL SUPREMO CONFIRMA DE NUEVO EL AUTO DE GARZON PROHIBIEND MANIFESTACIONES PRO-BATASUNA

MADRID
SERVIMEDIA

El Tribunal Supremo ha ratificado el archivo de la querella que el Gobierno vasco presentó contra el juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón por un delito de prevaricación, supuestamente cometido al dictar un auto el pasado 12 de septiembre, por el que prohibía una manifestación de apoyo a Batasuna.

El equpo del lehendakari Juan José Ibarretxe consideró que el auto de Garzón prohibiendo las manifestaciones pro-Batasuna era "injusto" y lo dictó a sabiendas de que vulneraba derechos fundamentales, como el de reunión y manifestación.

Sin embargo, los magistrados de la Sala de lo Penal del Tribunal Supremo archivaron la querella el pasado 20 de enero, por considerar que el auto dictado por Garzón "no constituye, en modo alguno, un apartamiento del principio de legalidad ni una interpretación irrazonable delas normas que sustentaban la decisión cuestionada".

El Gobierno vasco presentó un recurso de súplica contra tal archivo, que ha sido desestimado, al considerar los magistrados que el auto de Garzón es conforme a Derecho.

"Ni la resolución cuestionada reúne los elementos para ser considerada prevaricadora ni la decisión de suspender la reunión y manifestación a que se hace referencia puede entenderse como obstáculo ilícito al derecho de reunión", añaden.

En cuanto a que el auto de Garzón lesonaba los derechos de reunión y manifestación, los magistrados del Supremo vuelven a recordar que el Tribunal Constitucional ya ha señalado que los mismos "no son absolutos e incondicionables".

Para el Gobierno de Ibarretxe, las medidas adoptadas por Garzón en su día para decretar la suspensión de actividades de Batasuna no le permitían "restringir derechos de personas ajenas a este proceso" contra el entorno de ETA.

El Ejecutivo de Ibarretxe argumentó que el auto de Garzón prohibiendo la manifesación convocada bajo el lema "Gora Euskal Herria" fue una decisión "injusta" y poco fundada.

"El mencionado auto supone una desviación, un exceso y un abuso del derecho que lesiona derechos fundamentales. No sólo el de reunión, sino también el derecho fundamental a la presunción de inocencia o a obtener la tutela efectiva de los jueces, y extiende uan responsabilidad, no demostrada, a un amplio conjunto de ciudadanos preocupados precisamente por la vigencia y el libre ejercicio de los derechos fundametales", sostenía la querella archivada ahora por el Supremo.

(SERVIMEDIA)
08 Abr 2003
VBR