EL SUPREMO CONFIRA LA ABSOLUCION DE DOS GUARDIAS CIVILES DENUNCIADOS POR TORTURAS POR DOS ETARRAS

MADRID
SERVIMEDIA

El Tribunal Supremo ha ratificado la absolución de dos guardias civiles que fueron denunciados por torturas por los etarras Sebastián Lasa Mendiaraz y Alfonso Sebastián Iriarte, detenidos en 1998 por los dos agentes de la Benemérita.

En una sentencia difundida hoy, el Alto Tribunal ha negado la eficacia probatoria de las declaraciones de los dos terroristas, porque éstos reconocieron ant la Guardia Civil "unos hechos que implicaban a terceras personas" y "resulta razonable" pensar que trataron de lanzar "la sospecha de que tales declaraciones se habían otenido ilícitamente".

Asimismo, el Supremo considera que "las lesiones que presentaban los denunciantes eran absolutamente incompatibles con las brutales conductas que relataban -patadas, golpes en todo el cuerpo, intentos de asfixia, empleo de electrodos-". La sentencia concluye que las magulladuras de ambos etarras son "perfetamenteexplicables por el duro forcejeo producido en el curso de su violenta detención".

Los hechos probados por el tribunal se remontan a mayo de 1998 cuando agentes de la Guardia Civil observaron a Lasa e Iriarte realizando movimientos extraños en las proximidades del Acuartelamiento del Ejército de Tierra de Loyola de San Sebastián.

Poco después de que ambos etarras abandonasen el lugar, varios agentes del Cuerpo Armado comprobaron que, en el sitio por donde los terroristas habían merodeado, había do tubos lanzagranadas ocultos entre la vegetación apuntando hacia unas viviendas militares próximas al cuartel.

Tras el hallazgo, se desplegó un operativo para detener a Lasa e Iriarte. Los guardias civiles J.C.D y J.F.V.A. cubrían la zona por la que ambos etarras trataron de huir y les interceptaron. En el momento de la detención, los dos terroristas opusieran fuerte resistencia, por lo que, según la sentencia, los agentes usaron la fuerza "precisa" para reducirlos.

Durante el tiempo en que los dtenidos permanecieron en las dependencias de la Guardia Civil en Madrid, fueron reconocidos a diaro por el Forense adscrito al Juzgado Central de Instrucción número 6, quien observó pequeñas lesiones que evolucionaron favorablemente. Después del análisis inicial, Sebastián Iriarte se negó a ser reconocido por el médico.

(SERVIMEDIA)
14 Nov 2003
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