El sondeo, realizado en España por Sigma 2, indica que entre las cuestiones que más molestan a los ciudadanos también ocupan un lugar relevante el descuido y falta de higiene en los lugares públicos y los vecinos ruidosos.

Por el contrario, los resultados de la encuesta, publicados en el último número de la revista "El fumador", señalan que el tabaco ocupa el penúltimo lugar entre los diez asuntos propuestos, ya que también s sitúa por detrás de la embriaguez, el mal servicio en la hostelería, hablar en voz alta en el cine y decir palabrotas.

Sólo comer en público causa menos irritación que el tabaco a los entrevistados, aunque una proporción importante, el 39 por ciento, se muestran partidarios de que los gobiernos promuevan legislaciones contra el hábito de fumar.

Sin embargo, los españoles no fumadores se mostraron más tolerantes que los de otras nacionalidades, llegando un 55 por ciento de los entrevistados a afrmar que no les resultaba molesto este hábito, un 16 por ciento lo encuentra algo molesto y a un 14 por ciento le resulta bastante irritante.

Un 80 por ciento de los encuestados creen que que fumar debe ser un derecho individual, pero el grado de permisividad se reduce entre las personas de más edad.