"La verdad", dijo la dirigente parlamentaria socialista, "es que asisto absolutamente impávida a un espectáculo que me parece de no recibo, por no calificarlo de otra manera, e personas que se deberían presumir responsables y que además quieren presumirse como personas de Estado y que entran a juntarse a hacer ahora un manifiesto apoyando al ex presidente del Gobierno Adolfo Suárez, que, por cierto, tiene todo mi respeto y mi admiración, cosa que no hicieron, por lo menos varios de ellos, hace mucho tiempo".

En su opinión, "ese manifiesto más parece una operación motivada por una patología que yo creía que estaba radicada y residenciada sólo en el Gobierno de la nación y e el PP, pero que veo que es más extensa, más allá de lo que es el Gobierno actual, esa patología obsesiva por una persona que ha hecho mucho por este país y que logró cambiar y modernizar este país, que se llama Felipe Gonzñález".

"Esa patología obsesiva", reiteró, "va más allá de la derecha gobernante, que parece que está muy contenta con esta situación, cuando lo que debería era entristecer a alguien que está en el Gobierno que se monten operaciones de intento -digo intento porque no lo van a consegir- de acoso a un ex presidente del Gobierno".

"Me parece una fea operación que no dice nada a favor de quien la hace", concluyó Fernández de la Vega. "Yo creo que Adolfo Suárez, que tiene todos mis respetos, no necesita realmente de estas maniobras porque su labor y su trabajo está acreditado ante todos los españoles y ante todos los demócratas, y no necesita de estos 'lobbies' que en su día algunos de ellos se lo cargaron. Suárez fundó otro partido porque no los aguantaba".