LA SOMBRA DE CHERNOBIL OSCURECE MILES DE KILOMETROS CUADRADOS DE LA EX URSS SIETE AÑOS DESPUES DEL ACCIDENTE

- Mañana se cumple el séptimo aniversario del accidente más grave ocurrido en las historia de las centrales nucleares

MADRID
SERVIMEDIA

Mañana, día 26, se cumple el séptimo aniversario del accidente que sufrió la Central Nuclear de Chernobil (Ucrania), el más grave registrado en una instalación de este tipo, como lo demuestra el que ya haya prvocado más de 8.000 muertos entre las personas que trabajaron en la extinción del incendio, la construcción del sarcófago para contener la radiación y la descontaminación de la tierra.

Algunas estimaciones revelan que en la antigua URSS más de medio millón de personas morirán durante los próximos años como consecuencia de esta tragedia, ya que más de 4 millones habitan en zonas con niveles elevados de radiactividad.

Un círculo de 30 kilómetros de radio en torno a la central, en el que vivían 140.00 personas, se ha declarado inhabitable, y al menos 590.000 hectáreas son incultivables.

El consumo de alimentos afectados por la radiactividad ha aumentado los daños sobre la salud en numerosas zonas de la antigua Unión Soviética.

En Kiev, la incidencia de enfermedades sanguineas se ha multiplicado por 30 en los adultos y por 10 entre la población infantil.

CANCER Y BOCIO

En Gomel (Bielorusia), el epidemiólogo ucraniano Konstantina Sinyats ha detectado un aumento de los casos de cáncer d casi el 45 por ciento en los distritos más contaminados, mientras que los de bocio se multiplicaron por 15.

La catástrofe ha ocasionado hasta la fecha un coste que algunas fuentes sutúan en unos 38 billones de pesetas. Esta evaluación tiene en cuenta el tratamiento médico (2,6 billones), la limpieza de las zonas afectadas, los movimientos de población, evacuación y realojos (otros 2,6) y la descontaminación (33).

Coincidiendo con el aniversario de la catástrofe ocurrida hace siete años en la cenral nuclear ucraniana, las organizaciones ecologistas han recrudecido sus críticas hacia este tipo de instalaciones y la energía de origen nuclear.

En España funcionan en la actualidad nueve reactores, que en 1992 produjeron el 35,5 por ciento de la energía eléctrica. Tanto Greenpeace, como la Asociación Ecologista de Defensa de la Naturaleza (Aedenat), han pedido el cierre inmediato de las centrales de primera generación (Santa María de Garoña y José Cabrera), así como el de las que presentan un fall de diseño que afecta a las vasijas de los reactores (Almaraz I y II, Ascó I y II y Vandellós II)

No obstante, el fin último de las reivindicaciones ecologistas es conseguir el abandono de la energía nuclear y el cierre de todas las centrales.

El objetivo más inmediato de las organizaciones conservacionistas internacionales es impedir que la indusria nuclear occidental se extienda hacia los países del este de Europa.

Según los ecologistas, existen planes para reparar reactores que no reunen os mínimos de seguridad que exige la Organización Internacional de la Energía Atómica.

(SERVIMEDIA)
25 Abr 1993
GJA