En nueve de cada diez ocasiones las empresas señalan al INEM en la misma oferta de empleo la persona a la que desean contratar. En la ocasión restante, la empresa confía la selección de la persona idónea a la oficina del INEM.

Entre enero y agosto de 1990, últimos datos disponibles, las colocaciones registrads fueron 3.410.400, de las que 3.085.600 fueron de trabajadores escogidos por las propias empresas y 324.800 de los seleccionados por el INEM.

Estas cifras muestran que las empresas recurren cada vez menos al INEM para encontrar empleados, ya que el número de colocaciones realizadas al amparo del instituto ha experimentado la siguiente evolución: 1 de cada 6 en 1986, 1 de cada 7 en 1987 y 1988, 1 de cada 8 en 1989 y 1 de cada 10,5 en los ocho primeros meses de 1990.

Este proceso coincide con un priodo en el que, gracias a la recuperación económica y de la mayor confianza por ella suscitada, la demanda de empleo se ha multiplicado prácticamente por dos desde 1984.

Así, mientras que en el 84 el INEM registraba mensualmente 344.000 demandas de empleo, en el 89 esa cifra se elevó a 636.300. Sin embargo, en ese mismo lapso de tiempo aumentó año a año el número de ofertas de empleo pendientes de colocación, es decir, el de puestos de trabajo para los que el INEM no encontró un trabajador cualificad y dispuesto a ejercerlo.

Concretamente, las ofertas pendientes que se mantenían sin cubrir a finales de cada mes eran a mediados del año pasado 53.500. En 1984 eran 23.200, pese a que en aquel entonces el paro registrado era superior en más de cien mil personas y en ambas fechas superaba los dos millones.

Para la CEOE, este dato demuestra la necesidad de legalizar las empresas de empleo temporal, según manifestaron a Servimedia fuentes de la patronal, mientras que los sindicatos se oponen terminntemente a lo que consideran privatización de un servicio público esencial.

La CEOE considera absurdo mantener en la ilegalidad a unas empresas que están operando de hecho con la tolerancia de la Administración. Esta misma opinión fue manifestada recientemente por el ex ministro de Sanidad y Seguridad Social con el Gobierno de UCD, Enrique Sánchez de León, quien calificó de "ridícula" la situación de las agencias privadas de empleo.

RECOMENDACION DE LOS EXPERTOS

Por otra parte, la legalización e las actividades de estas empresas figura como una de las propuestas del informe encargado por el Ministerio de Trabajo a un grupo de expertos encabezados por el profesor Julio Segura.

Los expertos, sin embargo, aconsejan que se imponga como tope máximo para la duración de los contratos celebrados a través de estas empresas el mínimo que proponen para los contratos temporales de fomento del empleo.

En las conclusiones del informe, los expertos aseguran que "la realidad muestra que dichas empresa existen en España y ello es así porque presentan ventajas de intermediación en un segmento del mercado de trabajo: a las empresas les prestan un servicio de selección de personal previamente clasificado, a los trabajadores les evitan los costes de búsqueda".

Consideran asimismo que "la regulación de estas empresas repercutiría en beneficio de los trabajadores eventuales que, de esta forma, podrían pertenecer a las plantillas de las mismas, encontrándose más amparados por la ley que en las condicionesactuales".