Dolor crónico

Sólo un 16% de los estudios y ensayos clínicos se abordan en función del género

- Lo que repercute en los efectos secundarios y en el dolor que sufre la mujer

- VÍDEO: los clientes de Servimedia disponen de imágenes y sonido de estas declaraciones en el enlace https://servimedia.tv/TotalesDolorInvestigacionGenero

MADRID
SERVIMEDIA

Solamente un 16% de los estudios y ensayos clínicos se enfocan en función del género y sólo el 50% de las investigaciones tienen los datos diferenciados por sexos. Todo ello afecta a la respuesta de las mujeres a los medicamentos, a los efectos secundarios y al dolor que sufren.

Así se puso de manifiesto en el diálogo de la Plataforma Mujer y Dolor, celebrado en Servimedia con la colaboración de Grünenthal, foro en el que presentaron el ‘Libro Blanco Salud y Género’, que ha sido coordinado por el Observatorio de Salud (ODS).

En el acto, moderado por el director general de Servimedia, José Manuel González Huesa, participaron la miembro de la Junta directiva de la Plataforma Mujer y Dolor y directora Médico de Grünenthal Pharma, Ana Esquivias; la jefa de Servicio de Fomento de Redes y Centros de Excelencia de la Consejería de Sanidad de la Comunidad Valenciana, Ana Peiró; y la presidenta de la Plataforma de Organizaciones de Pacientes (POP), Carina Escobar.

Según Ana Esquivias, una asignatura pendiente en los ensayos clínicos es “evitar el sesgo de género”. Recordó que ya en 1991 la doctora Bernadine Healy acuñó el término 'síndrome de Yentl', y lo aplicó al campo de la Cardiología, al percibir el tratamiento diferencial de las mujeres que presentan síntomas distintos a los que suelen tener los hombres con la misma enfermedad.

MÁS ESTUDIOS EN HOMBRES

La doctora Healy vio que en su centro hospitalario “había menos mujeres diagnosticadas de enfermedades cardiovasculares, menos diagnósticos a mujeres, menos ingresos hospitalarios y había mucha menos representatividad de mujeres en estudios clínicos”.

La razón de este desfase, como detalló la doctora Esquivias, es que “históricamente la mayoría de los estudios clínicos se han hecho en animales macho y en hombres”.

La revista científica ‘Pain’ estima que el 50% de los estudios tienen los resultados diferenciados en función del sexo de hombre y mujer, pero "sólo un 16% de los estudios se abordaban en función del género, que es realmente muy poco", como destacó esta especialista.

Para paliar esta situación, Esquivias aboga por “fomentar en la formación la investigación para los propios alumnos también investiguen y se hagan estudios a largo plazo sobre qué factores de riesgo hay diferenciales” referidos a los sesgos de género en los estudios y ensayos clínicos.

“Haría falta evaluar en la práctica clínica y en investigación clínica no solamente los aspectos biológicos, sino también aspectos psicológicos y sociales que habitualmente no se tienen en cuenta en el desarrollo de los fármacos ”, agregó.

DOLOR CRÓNICO

Por su parte, la doctora Ana Peiró aseguró que una investigación apropiada es la clave para paliar el dolor crónico: "Hay una frase que dice que la esperanza en los pacientes se llama investigación", especialmente en "pacientes con dolor crónico" cuya vida se ve muy limitada por esta patología. Y además de prescribir medicación, la experta habló del necesario "acompañamiento" a los pacientes en la gestión del dolor por parte de los profesionales sanitarios.

Las expertas también debatieron sobre cómo fomentar la investigación en Atención Primaria, algo que, según Peiró, “es esencial” para que el dolor no se cronifique en una gran cantidad de pacientes. “Y esto es un reto con la carga residencial que tienen en Primaria", dijo, pero abogó por priorizar la formación de los médicos para que sepan abordar el dolor crónico.

Por todo ello, para Carina Escobar, es necesario "cambiar la forma de investigar" con el objetivo de que los síntomas y dolores de las mujeres se vean reflejados y atendidos en ensayos o investigaciones. “Tenemos que investigar de otra forma, tanto en en fases iniciales de investigación como también en vida real para tener resultados de cómo afectan los fármacos", recalcó.

Añadió que otro factor que hay que tener en cuenta es que existe un retraso de diagnóstico "muy importante" y ello supone "que lleguemos más tarde al fármaco” y que no se trate adecuadamente el dolor que sufren muchas mujeres.

(SERVIMEDIA)
23 Jun 2024
CAG/clc/gja