SOLCHAGA DICE QUE ESTARIA "ENCANTADO" SI HUBIERA ACUERDOS ENTRE LOS INTERLOCUTORES SOCIALES

MADRID
SERVIMEDIA

El Gobierno estaría "encantado" de alcanzar un pacto tripartito con la patronal y los sindicatos para hacer frente a la crisis, según dijo hoy el ministro de Ecnomía, Carlos Solchaga, durante su comparecencia en el Congreso para explicar la devaluación de la peseta.

Solchaga señaló que, aunque un pacto global es muy difícil, ha observado que los agentes sociales mantienen últimamente puntos de vistas más "flexibles" que hacen factible "áreas de colaboración" que permitan aumentar la competitividad.

El ministro insistió en que la devaluación no va a resolver los problemas de la economía, si bien indicó que aumentará las exportaciones entre un 1,5 y un 2 or cien y el crecimiento del PIB entre una y dos décimas, aunque al precio de elevar la inflación unos 0,3 puntos más en el plazo de un año.

Solchaga recalcó que el Gobierno no piensa elevar los tipos de interés y expresó su confianza en que la depreciación de la peseta haya sido suficiente para evitar nuevas especulaciones contra la moneda española.

No obstante, reconoció que un eventual "no" en el referéndum francés sobre Maastricht, el próximo domingo, no sólo pondría en nuevas dificultades alSistema Monetario Europeo, sino que probablemente obligaría a replantearse el Plan de Convergencia.

Explicó que no quiere ocultar a los ciudadanos que la economía nacional atraviesa "un momento difícil" y que el crecimiento del PIB será en 1993 incluso inferior al 1992. Al mismo tiempo, restó dramatismo a la situación, al asegurar que España ha afrontado problemas muchos mayores "cuando eramos mucho más pobres y los hemos sacado adelante".

Solchaga insistió en que las presiones sobre la peseta furon fruto de una especulación no justificada por el estado de la economía. Adujo como prueba que el movimiento especulativo afectó hoy seriamente al franco francés, la corona danesa y la libra irlandesa y se preguntó "¿qué ha cambiado en las economías de esos países de ayer a hoy?".

UN 5 POR CIEN MAS POBRES

La intervención del ministro dio lugar a un prolongado debate parlamentario, en el que el portavoz del partido popular, Rodrigo Rato, aseguró que la devaluación de la peseta ha hecho a los españoes un cinco por ciento más pobres.

Señaló que los movimientos especulativos contra las monedas no son fruto de la casualidad, sino que responden a los desequilibrios que los operadores en divisas detectan en una economía.

A su juicio, ha sido la política económica aplicada por el Gobierno y la mala marcha de la balanza comercial y la inflación, entre otras magnitudes, las que han favorecido la pérdida de confianza que ha provocado la caída de la peseta.

El portavoz de Izquierda Unida, José Lis Martínez Blasco, indicó que la depreciación de la divisa no puede achacarse a la existencia de "demonios especulativos", sino a que la peseta estaba artificialmente sobrevalorada, para financiar de manera más barata el déficit público con ahorro extranjero.

Miguel Roca, de Convergencia i Unió, y Emilio Olabarría, del Partido Nacionalista Vasco, también afirmaron que el nuevo tipo de cambio refleja más fielmente la realidad de la economía española y el segundo se felicitó explícitamente de la medidaadoptada, por el aumento que supondrá en las exportaciones de las industrias de Euskadi.

Por el CDS, José Ramón Lasuén, instó al Gobierno a secundar la devaluación con un plan de austeridad con haga disminuir el consumo de las familias y que potencie, mediante estímulos fiscales, el ahorro y la inversión.

(SERVIMEDIA)
17 Ene 1992
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