Solbes explicaba así la dotación de 100 millones de euros en los Presupuestos Generales del Estado para 2006, que calificó como "suficiente", a pesar de las críticas de partidos y sindicatos, que critican su baja cuantía.

El vicepresidente segundo del Gobierno explicó que la nueva Ley de Autonomía Personal y Atención a la Dependencia llegará al Congreso en enero y no estará en vigor hasta finales de año, con lo que el dinero bastará para "preparar temas de la ley y programas que se pueden poner en marcha".

Además, reiteró que se trata de una competencia de las comunidades autónomas y aseguró que la nueva normativa se apoyará en tres patas: pago por parte de los propios afectados (copago), dotación presupuestaria de las comunidades autónomas, y ayuda por parte del Estado, como ha hecho recientemente con la sanidad.

Por otra parte, Solbes se refirió a la complejidad de la nueva normativa y aseguró que la "clave" es "definir bien los objetivos" de esta cobertura para evitar que se genere "una demanda no justificada".

Fuentes gubernamentales explicaron a Servimedia que se trata de definir con claridad el concepto de dependencia para evitar que puede dar cabida a un elevado número de personas y dispare el gasto tanto que sea difícilmente asumible.

Finalmente, Solbes aseguró que el Gobierno mantiene un elevado grado de preocupación con el envejecimiento de la población y cómo puede afectar al sistema público, tanto sanitario como de Seguridad Social, y confía en que se pueda mantener el gasto y el pago de las prestaciones, siempre aplicando reformas para que este gasto sea más eficiente.