No obstante, Solana afirmó en la recepción oficial de la fiesta del 2 de mayo que nuestro país siempre ha sido "solidario" en el conflicto yugoslavo y que en esta ocasión estará también "a la altura de las circunstancias".

Solana será informado mañana en Londres por el secretario de Estado estadounidense, Warren Christopher, de las líneas maestras del plan de la administración Clinton contra Serbia para poner fin, incluso por la vía militar, a la guerra de los Balcans.

Según expresó a un embajador en conversación privada, Solana intentará conversar también con su homólogo ruso, Andrei Kozirev, para tantear la disposición del Gobierno de Yeltsin de llegar al extremo de acciones bélicas selectivas contra objetivos militares de las milicias serbias en Bosnia.

El ministro de Exteriores español se mostró optimista ante la, hasta ahora, última ronda de conversaciones mantenida entre los mediadores de la CE y la ONU y las partes implicadas en el conflicto. "Nuestrodeseo es que estas conversaciones sean un paso definitivamente positivo", dijo.

No obstante, la administración Clinton no decidirá en firme actuar militarmente hasta que Christopher concluya su gira por varias capitales europeas para conseguir la unanimidad de criterios de la comunidad internacional sobre una posible intervención militar en la antigua Yugoslavia.

Según fuentes norteamericanas, Clinton estaría dispuesto a bombardear objetivos militares de las milicias de Radovan Karadjic y a levanar el embargo de armas a los musulmanes de Bosnia.