SOLANA ESCARTA SUPRIMIR LA AYUDA ESPAÑOLA A GUINEA
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El ministro de Asuntos Exteriores, Javier Solana, descartó hoy suprimir la ayuda que España otorga a Guinea como parte del compromiso español de cooperar en el desarrollo democrático pacífico de este país, aunque reconoció que en las últimas fechas se han producido en dicho Estado acontecimientos "execrables".
La posibilidad de cortar la cooperación que no sea de carácter humanitario a Guinea fue solicitada hoy por el diputdo del Grupo Popular Javier Rupérez durante la comparecencia de Solana en la comisión de Asuntos Exteriores del Congreso de los Diputados.
Para Rupérez, el Gobierno español no debe continuar cooperando con un país que, a su juicio, es una manifestación de un régimen autocrático, y citó como ejemplo de las ayudas españolas, la subvención que la televisión española concede a la guineana y las deudas que tiene ese país con Iberia.
El jefe de la Diplomacia española explicó que para el Gobierno españo es "muy difícil" cortar dicha cooperación bilateral, que asciende a 2.000 millones de pesetas, el 14 por ciento del PIB guineano, debido a que en un 90 por ciento está destinada a sanidad y educación.
No obstante, señaló que el Ejecutivo no descarta suprimir el resto de la ayuda que no tenga fines humanitarios, como las subvenciones a la televisión, y anunció que el Gobierno ya ha adoptado alguna iniciativa en esta línea que, por el momento, no quiso explicar.
Durante su intervención, Rupérez tabién criticó el hecho de que España pretenda destinar a finales de este siglo el 0,7 por ciento de su PIB para la cooperación al desarrollo, como anunció Felipe González en la "cumbre de Río", cuando , por otra parte, el propio Ministerio de Asuntos Exteriores va a recortar sus actividades en el extranjero, lo que, para el diputado popular, constituye un "doble lenguaje".
Según Solana, la cooperación con los paises subdesarrollados, a la que el Gobierno destina un 0,24 del PIB, es un deber moral de Esaña ya que, dijo, vivimos en un país próspero comparado con otros, "aunque la sociedad no tenga conciencia de lo que somos" por lo que, en su opinión, es necesario prepararla.
El titular de Asuntos Exteriores también rechazó las críticas del Grupo Popular sobre la "dejación" del Gobierno español en la última década respecto a Gibraltar, y negó las acusaciones de Rupérez de "debilidad profrancesa" diciendo que España mantiene unas relaciones "privilegiadas" con Francia por su vecindad.
Solana compreció en la Comisión de Exteriores a petición del Grupo Popular para explicar las medidas que adoptará su departamento con las que, en su conjunto, se mostraron de acuerdo los grupos de la oposición.
Entre ellas, resaltó la voluntad de estrechar las relaciones con Iberoamérica, el Magreb y los países vecinos de España (Francia, Portugal y Marruecos, al tiempo que hizo hincapié en la voluntad del Ejecutivo socialista de mantener y desarrollar las alianzas defensivas, especialmente la Unión Europea Occiental (UEO).
También afirmó que el Ministerio de Asuntos Exteriores va a fomentar la cooperación al desarrollo, a impulsar la política de promoción y defensa de los derechos humanos y a mantener e incrementar la presencia de fuerzas españolas en las misiones de paz de las Naciones Unidas, que no descartó que en un futuro se puedan hacer bajo el mando de organizaciones regionales, como la UEO.
Finalmente, Javier Solana destacó la necesidad de mejorar el servicio exterior, tanto en sus infraestructras, entre ellas una nueva sede para el ministerio, como en los medios humanos del departamento, creando un cuerpo intermedio de funcionarios.
(SERVIMEDIA)
16 Sep 1992
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