"La propuesta de Aznar no es nada más que un juego de artificio para evitarllevar al Parlamento el debate de un programa que el PP no tiene", asegura Solana.

El titular de Exteriores descarta que se vaya a plantear una cuestión de confianza porque "en este momento hay una estabilidad total desde el punto de vista parlamentario". Además, considera que la reunión celebrada la pasada semana entre Felipe González y Alfonso Guerra significa que "el PSOE es un partido que está unido".

En cuanto a la situación económica del país, opina que "hay que bajar la temperatura polític y social para aprovechar la recuperación económica" y señala que "la colaboración de Convergència i Unió ha sido muy importante para vencer la recesión".

Respecto a la corrupción, Javier Solana indica que "sin duda estoy preocupado, como lo está cualquier persona responsable en este momento", aunque añade que "la preocupación no debe ser paralizante" ni debe impedir "seguir empujando hacia adelante", porque "están funcionando las instituciones".

Por otro lado, el ministro no cree que el PSOE hay llegado al final de su ciclo de gobierno. "El Partido Socialista tiene un proyecto que viene de muy atrás y que seguirá durante muchísimo tiempo", afirma.