Durante una concentración convocada hoy, a primera hora de la tarde, ante la sede socialista quefue atacada pos los radicales, el parlamentario Rodolfo Ares afirmó que "probablemente quienes vinieron a la `casa del pueblo' son vecinos del barrio, seguramente además estaban a las ordenes de quienes van en la lista de HB, probablemente les conocemos todos, y lo único que han demostrado es su incapacidad para defender sus ideas con la palabra, con propuestas o con su programa".

Los vecinos del inmueble, en cuyos bajos esta ubicada la sede socialista incendiada, expresaron su preocupación por las cosecuencias que podía haber tenido el ataque si llega a extenderse el fuego hacia las viviendas. "Podiamos estar ahora sufriendo una tragedía", repetían.

El ataque a la sede socialista se produjo a primera hora de la noche, durante los incidentes que protagonizaron en ese barrio bilbaino una veintena de encapuchados que secundaban el "Borroka Eguna" (día de lucha), convocado por KAS y JARRAI.

Los encapuchados, que vestían de negro y portaban hachas, martillos y diverso material incendiario, quemarn previamente un autobus, después de obligar a su conductor a abandonar el vehículo. Ese mismo grupo rompió después la cristalera de una sucursal bancaria y arrojó un cóctel molotov al interior de la entidad.

Posteriormente, los encapuchados se dirigiron a la sede socialista, donde se encontraba una decena de personas, entre ellas dos niños de corta edad y un grupo de personas mayores jugando a las cartas, y tras conminarles a abandonar el local, al grito de "sí no salís, os matamos", arrojaron vario bidones de gasolina y les prendieron fuego.

El responsable del local sufrió quemaduras en una mano al coger uno de los bidones para arrojarlo fuera del establecimiento. Esta misma persona evitó que el incendió fuera a más, arriesgandose a entrar de nuevo al interior del local para coger dos extintores para sofocar las llamas.

Los asaltantes continuaron cometiendo actos vandálicos por el Casco Viejo bilbaino, zona en la que fue por la Ertzaintza A.M.B., de 20 años de edad.