Este año, en contra de lo que era habitual,no se ha producido la reunión entre representantes del Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales y de los agentes sociales, a los efectos de informarles de la subida decidida por el Gobierno.

Los sindicatos se han negado a acudir a este encuentro por considerar que no se producía una negociación, sino que simplemente recibían una información del Ejecutivo.

Un año más el Salario Mínimo Interprofesional (SMI) se incrementaría lo mismo que la inflación prevista por el Gobierno en los Presupuestos Genrales del Estado.

En 1997, la subida fue del 2,6%; para 1998 se aprobó un incremento del 2,1%; en 1999 se acordó una mejora del SMI del 1,8%; y en los tres últimos años, 2000, 2001 y 2002, los incrementos han sido de un 2%.

CRITICA UGT Y CCOO

Los sindicatos han reclamado una subida mayor a la que previsiblemente aprobará el Gobierno. Piden que el salario mínimo suba lo mismo que la inflación real (3,9% actualmente) y no la previsión que maneja el Gobierno para 2003.

CCOO y UGT aceptarían qe el salario mínimo siguiera un esquema similar al que tienen las pensiones, de forma que se pueda subir la previsión de inflación en enero, pero compensarse la pérdida de poder adquisitivo con la inflación del mes de noviembre.

Los sindicatos han presentado tres demandas básicas al Gobierno: que el SMI no se utilice como renta de referencia para la concesión de viviendas, becas y otras ayudas; establecer una cláusula de revisión aplicable a todos los perceptores del salario mínimo; y fijar, en un maro plurianual, las subidas necesarias del SMI para aproximarlo al 60% del salario medio (actualmente está en el 36,9%) como recomienda la Carta Social Europea.

Según los datos de las centrales sindicales, cerca de 500.000 trabajadores perciben actualmente el salario mínimo, principalmente jóvenes y mujeres. A su juicio, subir el salario mínimo "es clave para corregir desigualdades sociales".