Las acusaciones apuntan a la explotación laboral de niños, así como a las pésimas condiciones higiénicas de los empleados. A pesar de disponer de certificados de calidad social y medioambiental, y de reivindicar un estatus de empresa socialmente responsable, la multinacional ha comenzado a ser investigada por diversos sindicatos y ONG sudamericanos.

Este sector del mercado está acaparado por tres multinacionales: Dole, Chiquita y Del Monte Fresh Produce. Dole representa más de la cuarta parte del comercio internacional de plátanos. Además, la empresa posee sus propias plantaciones en diversos países de América Latina, lo que la hace directamente responsable de las condiciones sociales e higiénicas del entorno laboral.

En una carta remitida a la compañía, la coalición de sindicatos y ONG denuncia también que no se respetan la libertad de asociación, la libertad sindical y el derecho a la negociación colectiva.