La falla consta de una figura central que representa a presidente del Ejecutivo, Felipe González, quien aparece sentado sobre varios pergaminos que simbolizan el "decretazo" y los casos de corrupción política, atenazando con sus manos a dos personajes más pequeños, que están amordazados y se identifican con los obreros.

A ambos lados de la escultura principal, que está atravesada por el AVE, la falla hace alusión a varios de los personajes más controvertidos de la vida pública española, como el matrimonio Boyer, que aparece dibujado frente a su nueva manión, conocida popularmente como "Villa Meona".

Bajo el cuadro, la falla recoge una escena de la obra de Goya "Los fusilamientos del Dos de Mayo", aunque aquí los tres militares que disparan llevan escritas en sus espaldas las palabras Sol-cha-ga.

En un letrero situado junto al dibujo se puede leer: "Catorce cuartos de baño para lavarse y mear, y hay un currante que no tiene ni silla donde sentar".

"Eso es verdad", apostilló una mujer que contemplaba la obra, quien añadió: "Es indignante que eñoras como esa despilfarren el dinero a su antojo, mientras que los trabajadores son los que siempre tienen que salir perjudicados con las medidas económicas del Gobierno".

En la parte izquierda de la falla, otro dibujo reproduce a dos de los personajes implicados en el caso Ibercorp: Mariano Rubio, que aprieta el cinturón de un obrero, y Manuel de la Concha. Ambos aparecen acompañados por otras figuras, una de las cuales representa al hermano del ex vicepresidente del Gobierno Juan Guerra.

Tambén junto al cuadro figurann varios carteles, uno de los cuales lleva inscrita la siguiente leyenda: "Dice que todo es un bulo, pero al buen Mariano Rubio se le ha visto hasta el culo".

La construcción se completa en su parte posterior con una gran bolsa de la que sobresalen billetes, que, según los sindicatos, significa la inflación.

Otro cartel colocado junto a la bolsa, sobre la que se asientan las mascotas de las Olimpiadas de Barcelona y de la Expo de Sevilla, reza así: "Unos se mueren de hamre y otros se dan un atracón".

Desde su colocación, este mediodía, en la Puerta del Sol, la falla sindical levantó la expectación y asombro de los transeúntes de esa céntrica zona de la capital, la mayoría de los cuales asentían tras leer los carteles del conjunto, esbozando una sonrisa sarcástica.