LOS SINDICATOS CALIFICAN DE "DESMDRE" LA SITUACION EN LAS CARCELES Y PIDEN DIALOGO CON EL GOBIERNO

MADRID
SERVIMEDIA

Los sindicatos de prisiones de CSIF y UGT calificaron hoy de "desmadre" la situación de inseguridad en las cárceles españolas y pidieron al Gobierno un diálogo para decidir conjuntamente las medidas que deben tomarse con el fin de terminar con las rebeliones, motines y fugas en los centros penitenciarios.

Las direcciones de ambas centrales sindicales expresaron hoy su preocupación por la fuga de dos prsos del centro penitenciario de Huesca y su desacuerdo "con la medida adoptada para resolver el conflicto -ceder el coche del director y dos rehenes para escapar-, ya que no consigue evitar el objetivo de fuga de los internos".

También criticaron esta decisión por el peligro que supuso para los retenidos y porque podría generar un "efecto mimético en el futuro".

Los responsables del sindicato de Prisiones de CSIF indicaron que "el continuo desmadre existente en los centros penitenciarios españole no ha encontrado, por parte de la Administración, medidas para solucionarlo", al tiempo que reclaman la convocatoria urgente de la Comisión Permanente de Seguridad en las Cárceles para analizar la situación.

Esta central reclama también el inicio de acciones concretas contra los internos de máxima peligrosidad, paragarantizar "una mínima convivencia en el interior de los establecimientos de reclusión".

Por su parte, responsables de la rama de prisiones de la Federación de Servicios Públicos deUGT aconsejaron al Gobierno que revise la actual política de traslados de internos cuyas condenas son de larga duración y su peligrosidad desaconseja una movilidad continua.

Para el sindicato socialista, es imprescindible que el futuro Código Penal que prepara el Gobierno introduzca la figura delictiva del secuestro y retención del empleado público en el ejercicio de sus funciones, al tiempo que reclamó un mayor presupuesto en 1992 que permita aumentar las plantillas y mejorar las condiciones de segurdad en las cárceles.

Los dos reclusos fugados de la prisión de Huesca retuvieron durante unas horas a varios funcionarios del establecimiento como rehenes y solicitaron un helicóptero para salir de la cárcel.

Tras una larga negociación con los responsables del centro, los dos presos tomaron el coche del director, que se les había cedido a cambio de dejar libres a los rehenes, y huyeron de la cárcel con dos de los funcionarios, aunque posteriormente los pusieron en libertad.

El secretario genral de Asuntos Penitenciarios, Antoni Asunción, coincidió con los sindicatos en que la solución adoptada por las autoridades de la cárcel para solucionar el conflicto "ha sentado un precedente muy peligroso", y apuntó que sólo una acción policial inmediata servirá para desanimar a quienes pretendan imitar a los reclusos fugados.

Asunción señaló que sólo en otra ocasión se facilitó la huida de dos amotinados, que se habían hecho fuertes reteniendo a trabajadores de la prisión donde estaban, "pero entones se interceptó el vehículo antes de que abandonase el recinto de la prisión".

(SERVIMEDIA)
30 Nov 1991
G