El pasado día 12, agregaron las mismas fuentes, un grupo de sindicalists de UGT y CCOO no pudieron acceder al establecimiento para informar a los empleados sobre sus derechos y la elaboración de candidaturas, por orden del director de Recursos Humanos.

Ante la prohibición de la patronal, los sindicatos presentaron una denuncia contra Alcampo en una comisaría de esta localidad madrileña, por "conducta antidemocrática e inconstitucional, contraria a la libertad sindical".

Dos días después, unos 60 delegados de UGT y CCOO y algunos miembros del comité de empresa de Alcmpo-Alcalá de Henares se concentraron delante de las puertas del establecimiento y cuando quisieron entrar al mismo, en un principio los directivos trataron de impedírselo.

Al no conseguir impedir la entrada y con los concentrados en el interior del comercio, el director de Recursos Humanos pidió a los representantes de los sindicatos media hora para consultar con sus superiores.

Trascurrido este tiempo y tras hablar con el director general de Recursos Humanos de Alcampo, el responsable de la sucrsal alcalaína informó a UGT y CCOO de lo que le habían dicho: "No se puede entrar al centro a hacer campaña, ni a la cafetería, ni al almacén", indicaron las mismas fuentes.

"El comportamiento de esos señores representa una agresión a los derechos de los trabajadores y es una buena muestra de que la democracia aún no ha entrado en muchas empresas madrileñas", concluyeron.