Miguel Jiménez, miembro de la Ejecutiva del sindicato, declaró a Servimedia que la huelga estaría "plenamente justificada". "Los profesores contratados ven que se acerca el final decurso y que el Gobierno sigue sin hacer caso a las peticiones de más estabilidad laboral que vienen planteando desde hace mucho tiempo", opinó.

Aunque la organización estudiantil ve "lícita" la protesta, cree que hubiera sido más efectivo que los profesores hubieran salido hace meses a la calle de la mano de alumnos y padres, para protestar contra la política educativa del PP, tal y como propuso el Sindicato de Estudiantes.

Jiménez dijo que confía en que no les afecte mucho la huelga de los docenes, que se plasmaría en la corrección de las pruebas sólo en horario y en dependencias oficiales.

Los profesores darían a conocer las notas a los alumnos, pero no entregarían las actas, lo que supondría un bloqueo de las matrículas y la imposibilidad de concretar los grupos para el próximo curso.

CCOO, sindicato mayoritario en universidad, calcula que en torno al 70 por ciento de los profesores podría secundar la huelga. Apoyan esta medida de presión las coordinadoras de profesores no permanentes pero no el resto de sindicatos mayoritarios.

UGT y CSIF sostienen que no es el momento de convocar unas protestas de esa naturaleza, en un momento en que hay abierta una mesa negociadora con el ministerio. La mesa volverá a reunirse el día 17, fecha en la que CCOO confirmará su decisión definitiva.