Para Simancas, la Cañada Real es "una vergüenza y una indecencia a las puertas de la capital de España. Es el patio trasero de una ciudad que quiere ser olímpica, mientras que la Comunidad de Madrid, que es la administración con las máximas competencias para solucionarlo, no hace nada por evitarlo".

Tras visitar el asentamiento ilegal de la Cañada Real Galiana, reclamó asimismo que el Gobierno regional, responsable de esta vía pecuaria, "lidere un plan de rescate social" para la zona.

Simancas explicó que en esta zona "malviven unas 40.000 personas, a pesar de que está prohibida la edificación sobre estos terrenos", y destacó que el "carácter ilegal del asentamiento y la inactividad del Gobierno regional propician que allí se sucedan una serie de graves problemas sociales".

Manifestó que la Cañada Real Galiana también alberga "un grave problema social", porque "unas 1.500 personas viven en condiciones de indignidad, marginalidad e insalubridad".

El líder del PSM afirmó que es uno de los "pocos focos de Europa donde se han producido casos de sarna entre los niños, una enfermedad que creíamos erradicada en este país". A ello se une el "grave problema de orden público, ya que parte del tráfico de drogas del poblado de las Barranquillas, ante las noticias de que se puede desmantelar, se está trasladando a la Cañada Real".

Destacó que en la Cañada Real no existe disciplina urbanística, ya que "hay más de 2.000 edificaciones ilegales, donde pueden vivir, según estimaciones, 40.000 personas", y la existencia de un "grave problema ambiental, ya que supuestamente se trata de un corredor ecológico, pero con todo tipo de escombreras".

Simancas señaló que también existe "un problema viario, ya que se calcula que circulan 4.000 camiones diarios, lo que provoca graves problemas de accidentalidad".