Tras su reunión con el alcalde de Bogotá (Colombia), Luis Eduardo Garzón, el secretario general del PSM-PSOE explicó que cerca de dos mil inmigrantes colombianas se encuentran en Madrid ejerciendo la prostitución, de la cuales un 10% son menores de edad, sin ningún tipo de seguridad social y explotadas por redes de mafiosos que las mantienen en España bajo amenaza de su propia integridad física y la de sus familias en Colombia.

"Las autoridades colombianas se comprometen a colaborar dando un nuevo pasaporte, un duplicado, a todas las mujeres que están siendo chantajeadas, por quienes les retienen este documento", aseguró Simancas.

El responsable socialista concretó que las mafias obligan a muchas mujeres colombiana a ejercer la prostitución, "las traen de su país engañadas, las quitan el pasaporte y presionan a las familias, provocando una auténtica crisis social, ya que si estas mujeres logran abandonar la prostitución, luego tienen dificultades para adaptarse socialmente".

Otro hecho que resaltó Simancas fue que, actualmente, si una mujer denuncia a su proxeneta y finalmente es condenado, a ésta se le arreglan todos los papeles para permanecer legalmente en España.

El portavoz socialista propuso que "por el mero hecho de denunciar, ya se le tramite toda la documentación necesaria para garantizar a esa persona una total seguridad jurídica".

Ambos dirigentes coincidieron en que se necesita elaborar una estrategia conjunta en la que participen los gobiernos nacionales, autonómicos y locales, así como las familias de las jóvenes, para que denuncien a los miembros de estas redes y permitan a las fuerzas policiales, españolas y colombianas, a actuar contra ellas.

En este sentido, el SENA (Servicio Nacional de Aprendizaje de Colombia) estaría dispuesto a aportar recursos encaminados a un programa integral de rehabilitación para las mujeres que deseen abandonar la prostitución, concluyó el responsable colombiano.