Simancas pidió a la presidenta del PP de Madrid, Esperanza Aguirre, el cese de Granados, secretario general del PP y consejero de Presidencia, y Güemes, secretario de Comunicación del Partido Popular y consejero de Empleo y Mujer.

Recordó que ambos líderes populares "acusaron sin fundamentos al fiscal general de España de prevaricación y presionaron constantemente a los tribunales para que no investiguen la trama inmobiliaria de Majadahonda, y ayer, para colmo de la irresponsabilidad, tacharon de sectarios a nada más y nada menos que a los magistrados del Tribunal Supremo tras su decisión de archivar la denuncia contra Cándido Conde-Pumpido".

Señaló que, con su actitud, Granado y Güemes, "han avergonzado y puesto en evidencia a los madrileños con sus acciones, por lo que no pueden ejercer ni un minuto más sus puestos de responsabilidad".

Aseguró que la decisión del Tribunal Supremo supone un "tremendo revolcón judicial para Aguirre", ya que "ha desmontado uno a uno sus argumentos delirantes contra el fiscal".

Señaló que el alto tribunal ha precisadoa los dirigentes populares que "contra la Fiscalía no caben demandas, sino querellas, y tampoco hay prevaricación porque no hubo una decisión arbitraria al tramitar la denuncia del PSM contra las presuntas irregularidades en la política urbanística del PP en el noroeste madrileño".

Simancas reclamó a Aguirre que "asuma su responsabilidad ante este revolcón judicial y por quedar en evidencia sus intentos de tapar su implicación en la trama urbanística de Majadahonda".