Los hechos ocurrieron cuando los trabajadores de esa empresa procedían a cimentar el segundo piso del edificio, situado en la calle Ginés de la Hoz.

En esos momentos trabajaban en la obra 15 obreros que pudieron abandonar el lugar debido a que la estructura se vino abajo poco a poco, salvo seis y una mujer que pasaba por debajo de la construcción que resultaron heridos con pequeñas heridas superficiales.

El gerente de Hormiconsa, Miguel Morales, cree qu el derrumbre se produjo como consecuencia de la rotura de un "latiguillo de uno de los puntales que sostenía el techo".

La rotura se podría deber a que la estructura de hierro no pudo soportar la presión de la bomba al echar el hormigón, arrastrando al resto del edificio.

Se da la circustancia de que el Ayuntamiento había ordenado la paralización de las obras en dos ocasiones debido a problemas de cimentación. No obstante, los responsables de la constructora aseguran que no tiene nada que ver laparalización con los motivos del derrumbe de hoy.