Según l primer balance de pérdidas, los daños materiales son considerables, ya que las fuertes lluvias han destrozado asentamientos, escuelas, hospitales y almacenes, lo que ha provocado la pérdida de las reservas de alimentos que existían en el campamento.

Esta es la segunda ocasión en tres semanas que esta zona sufre el azote de la naturaleza, ya que los pasados días 8 y 9 de octubre unas lluvias aún más violentas causaron graves daños en los campamentos de refugiados saharauis de Tindouf.

Las difícies condiciones de vida en los campamentos hacen que esta nueva catástrofe adquiera proporciones alarmantes, por lo que la Media Luna Roja Saharaui ha hecho un llamamiento a todos los países y organizaciones humanitarias para que envíen tiendas de campaña, alimentos y medicametos que alivien el sufrimiento de miles de familias.

Las últimas tormentas se produjeron coincidiendo con la visita de un centenar de españoles a los campos de refugiados, pero entre las víctimas no hay ninguna persona de nacionaldad española, de acuerdo con el balance provisional.

Los campamentos de Tindouf son el principal enclave de refugiados saharauis en territorio argelino, tradicional lugar de acogida para miembros del Frente Polisario en su enfrentamiento con el Gobierno de Marruecos.