Aunque en un principio se pensó que había sido liberado junto a otros tres misioneros italianos y el arzobispo de Freetown, monseñor Ganda, los misioneros han relatado que todosellos consiguieron escapar.

La huida se produjo hace dos días, durante un bombardeo en el lugar en que se encontraban retenidos, y aprovechando que en aquel momento los secuestradores, guerrilleros del Frente Revolucionario Unido (RUF), intentaban subirles a un camión para trasladarlos de lugar.

Cinco de los secuestrados, entre ellos Luis Pérez, lograron escapar y permanecieron dos días escondidos. Hoy abandonaron su refugio, al constatar que la zona en la que se encontraban había sido tomada porlas fuerzas internacionales del Ecomog.

Junto al misionero español y monseñor Ganda lograron escapar los italianos Mario Guerra, Juan Ceresolli y José Bertón. Todos ellos se encuentran en buenas condiciones físicas. Los cinco fueron conducidos ante el obispo de Makeni, Giorgio Biguzzi, que se encontraba en la zona intentando obtener información y contactos sobre los secuestrados.

Luis Pérez fue secuestrado el pasado día 12 junto a otros cinco religiosos italianos y seis monjas. Un día antes desapreció monseñor Ganda, y en noviembre de 1998 fue raptado otro misionero italiano.

Los misioneros que permanecen secuestrados o escondidos en otro lugar son los italianos Jerónimo Pistoni y Guillermo Zambiasi, y las seis monjas, cuatro de las cuales son de nacionalidad india, una keniata y otra de Bangladesh.

Además de los misioneros liberados y de los que permanecen secuestrados, en la actualidad en Sierra Leona, pese a la cruenta guerra civil que sufre el país, hay otros diez misioneros javerians, entre ellos el español José María Caballero.

La guerra de Sierra Leona comenzó hace ocho años y ha provocado cientos de miles de desplazados. La situación de la población es desesperada, asolada por el hambre, las enfermedades y la falta de protección.

Los misioneros javerianos han pedido a la comunidad internacional que haga todo lo posible para "acabar con el sufrimiento de tantas vícimas inocentes" y ponga fin "al innoble comercio de armas que aflige el continente africano".