Dichas fuentes explicaron que esto se debe a que la decisión adoptada ayer por el Supremo de admitir a trámite la denuncia de Roldán todavía no es firme, dado que es necesario que transcurra un plazo de 3 días antes de declarar su firmeza con el fin de que las partes personadas en la causapuedan recurrir la admisión.

Sin embargo, no parece probable que durante ese plazo sea presentado ningún recurso, ya que por el momento tan sólo está personado en la causa el ministerio fiscal que, además, informó en su día a favor de la admisión.

Las fuentes consultadas explicaron que, por el momento, ni Mario Conde, que solicitó su personación, ni el propio Roldán son partes en la causa, por lo que no pueden pronunciarse sobre la admisión. Tampoco podría recurrirla Narcís Serra en el caso de qu solicitase ahora su personación en el sumario, dado que esta petición, al igual que las de Conde y Roldán, tendría que resolverla posteriormente el instructor.

Así, una vez que el Alto Tribunal declare firme la admisión, la Sala Segunda notificará oficialmente al magistrado Moner la denuncia, tras lo cual podrá proceder a realizar los primeros trámites para investigar si Serra encargó y pagó con cargo a los fondos reservados del Ministerio de Defensa el denominado 'informe Crillon' sobre las actividaes del ex presidente de Banesto Mario Conde.

Según las mismas fuentes, la primera medida que adoptará Moner tras recibir la denuncia el próximo viernes será la de incoar un auto de apertura de procedimiento, con lo que se iniciará la causa. Posteriormente, deberá decidir si admite la personación en ella de Conde y de Roldán, tal como solicitaron ambos.

Asimismo, deberá pronunciarse sobre las diligencias solicitadas por el fiscal, entre las que figura la toma de declaración del ex director generalde la Guardia Civil como imputado por su presunta participación como cooperador en la elaboración del 'informe Crillon'.

Además, el fiscal pidió la comparecencia como testigos del secretario general de la Vicepresidencia del Gobierno, José Enrique Serrano; de la ex directora de la Oficina de Relaciones Informativas y Sociales de la Guardia Civil, Esther Fernández Iñigo; del teniente coronel Solís, que estuvo adscrito a la Dirección General de la Benemérita en la época de Roldán, así como los periodists Manuel Cerdán y Antonio Rubio.