Eduardo Serra, que compareció en rueda de prensa para explicar sus cien primeros días de gestión, explicó que el presidente del Gobierno le ratificó e el cargo en una conversación personal que se desarrolló en unos términos "para mí más que satisfactorios".

Al mismo tiempo que aseveró que se considera "absolutamente inocente", reiteró que "mi cargo está y estará a disposición de lo que decida el presidente del Gobierno, que es quien tiene que cuidar del daño que se le pueda hacer al Gobierno" respecto a su imagen.

En este sentido, negó haberse planteado la posibilidad de presentar su dimisión en el cargo a iniciativa propia, apelando a su convncimiento de que no tuvo responsabilidad personal alguna en el caso de las comisiones pagadas por la empresa en la que trabajó.

Preguntado por la posibilidad de que sea objeto de una campaña contra su imagen, Serra afirmó que, "a mí no me gusta ver campañas ni fantasmas donde nos los haya, lo que digo es que estoy sorprendido de que a raiz de una determinada decisión del Gobierno (la no desclasificación de los papeles del CESID) se iniciara una continua referencia al ministro de Defensa que ha pasado e protagonizar caricaturas o chistes a imputaciones que ponen en duda algo que es muy importante para los que trabajamos en esto, que es la honorabilidad personal".

Agregó "que por eso me pareció imprescindible salir al frente de ataques contra la honorabilidad personal, en este caso la mía".

El ministro de Defensa admitió que hubo prácticas irregulares en Cubiertas MZOV, pero que no se repitieron desde el momento en que él tomó posesión de la presidencia. "Yo llegué para luchar contra la corrupcón y creo que me acompañó el éxito en la gestión", dijo.