En los dos primeros meses de 1995, la producción hidroeléctrica era un 25,5% inferior a la del mismo período de 1994, lo que está forzando un aumento de las compras de fulóleos para este fin a las petroleras. ólo en enero, estas compañías han elevado sus ventas de este producto para generación eléctrica un 51 por cien.

Otro aspecto de la situación climática del país que se vuelve contra las eléctricas, añaden las fuentes consultadas, es que al haber altas temperaturas cae la demanda de electricidad para calefacciones, y limita el ritmo de crecimiento del mercado para estas compañías, un 2 por cien en lo que va de año, lo que en la patronal de empresas eléctricas, Unesa, califican de "moderado".

Un dat que refleja bien la situación es que frente al descenso de la produción hidráulica, la de origen térmico -carbón, fuel y gas- ha aumentado en estos dos meses un 8 por cien, y la de origen nuclear lo ha hecho un 6,7 por cien.

DEMANDAS

Con estos argumentos, las empresas eléctricas han redoblado sus esfuerzos ante el Ministerio de Industria para que acepte una negociación sobre la reforma del sistema retributivo que compensa a las compañías de sus costes a través de la tarifa, extremo que ya ha sido tasladado por parte de los responsables de las empresas al departamento de Juan Manuel Eguiagaray.

De hecho, en los contactos mantenidos en las ultimas semanas entre los representantes de Unesa y la Secretaría General de la Energía, para discutir el desarrollo reglamentario de la nueva Ley de Ordenación del Sector Electrico Nacional (LOSEN), se ha hecho ver al Ministerio la necesidad de incluir en las negociaciones este aspecto.

En esa petición incluyen, como aspecto fundamental, que se considere l año hidráulico en la elaboración, cada año, en el expediente de tarifas, con el fin de que las retribuciones que obtienen las compañías por este motivo en el recibo de la luz estén más ajustadas a la realidad.

Por el momento, según ha podido saber Servimedia, la única respuesta del Ministerio es que habrá que esperar esta año a conocer los estados contables de todos los negocios eléctricos, fundamentalmente generación y distribución, a lo que obliga la nueva ley del sector, y a la vista de los resulados que arrojen se decidirá si es necesaria una revisión del marco retribuitivo o no.