Pocos minutos antes de las diez de esta mañana, Barrero y sus más estrechos colaboradores esperaban, en la parte interior de la llamada "Puerta del Rey", la hora de apertura de la misma, por donde los primeros ciudadanos interesados iniciaron su recorrido y la visita a la expoición "Un siglo de vida política y parlamentaria en España. 1898-1998", ubicada en los pasillos de la Cámara.

El intenso frío que se registra en Madrid en el día de hoy no impidió que un nutrido grupo de personas, de todas las edades aunque especialmente jóvenes estudiantes, hicieran cola desde media hora antes para ser los primeros testigos de excepción de una circunstancia extraordinaria, por ser la primera ocasión en que el Senado puede ser visitado sin previa solicitud o autorización.

Barrero que mostró un abierto interés por estrechar la mano de todos los primeros visitantes, manifestó a los periodistas su convencimiento de que todos los asistentes "saldrán hoy del Senado con un conocimiento más exacto de lo que se hace en esta casa y se sentirán orgullosos de que existan instituciones como ésta".

Una ajetreada agenda la del responsable máximo de un edificio que está tomado hoy por periodistas y técnicos, que realizan sus programas de radio y televisión en directo y para toda España desd diferentes salas. El propio Barrero, que tuvo que abandonar una tertulia matinal para abrir la "Puerta del Rey", y volver a otra de inmediato, afirmó que atiende estas obligaciones "con paciencia, pero, al mismo tiempo, con muchas ganas de saludar a todo el mundo, de que nos visite todo el mundo y de que todos ellos se sientan muy a gusto en esta casa".

Serán tres días, desde hoy, en los que el Senado mantendrá abiertas sus puertas a todos los ciudadanos que deseen visitar la Cámara. Sin embargo, la isita a la exposición y al antiguo salón de plenos, donde se proyecta un audiovisual con la historia del Senado, será posible por espacio de dos meses.