EL SENADO CARECE DE SEGURO CONTRA INCENDIOS PARA PAGAR LA REPARACION DE LA SAUNA INENDIADA

MADRID
SERVIMEDIA

El edificio del Senado no tiene seguro, por lo que tendrá que pagar de su propio presupuesto la reparación de la sauna, que se incendió la madrugada del pasado domingo al averiarse el termostato.

Así lo explicó hoy en rueda de prensa el socialista Bernardo Bayona, vicepresidente primero del Senado, quien afirmó que los edificios del Estado suelen carecer de seguro para no añadir "mayores cargas" a los contribuyentes.

Bayona, tras precisar que todavía no ay una estimación de los daños causados por el siniestro, indicó que la causa del mismo fue una avería del termostato, producida después de que alguien se hubiese olvidado de apagar la sauna a última hora del viernes, que es el último día de la semana en que puede utilizarse.

No obstante, el vicepresidente de la Cámara Alta aseguró que los sistemas de seguridad funcionaron correctamente, ya que sólo se quemaron seis metros cuadrados, y que los vigilantes nocturnos cumplieron con su papel, puesto que feron ellos quienes avisaron a los bomberos.

Reconoció, sin embargo, que, para prevenir nuevos siniestros, la mesa del Senado decidió hoy ordenar una revisión completa de los "puntos sensibles" del edificio, especialmente las cocinas, aunque no emprenderá ninguna investigación para determinar quien se olvido de apagar la sauna.

Por otra parte, Bayona rebatió la acusación de que el nuevo edificio del Senado, inaugurado en 1991, fue construido sin licencia, recordando que el artículo 72 de la Constiución reconoce esa facultad a las cámaras legislativas y los demás poderes del Estado.

A su juicio, dicha facultad está comprendida dentro del apartado tres de dicho artículo, según el cual "los presidentes de las cámaras ejercen en nombre de las mismas todos los poderes administrativos y facultades de policía en el interior de sus respectivas sedes".

Negó también que el Senado ejerciera presiones sobre los bomberos que actuaron en la extinción del incendio para que no facilitaran información. Algó, a este respecto, que en la misma madrugada del domingo, el jefe de prensa del Senado llamó a algunos medios informativos para informales del siniestro.

Asimismo, mostró un escrito del Ayuntamiento de Madrid, de 1987, en el que la corporación local daba el visto bueno a la ampliación del Senado, y expresó su sorpresa por las declaraciones en sentido contrario del actual concejal de Obras, Enrique Villoria.

(SERVIMEDIA)
20 Oct 1992
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