Así lo manifestó Saiz en una comparecencia en la Comisión de Trabajo, Inclusión, Seguridad Social y Migraciones del Congreso de los Diputados para exponer las claves de la nueva legislatura en su Ministerio, donde explicó que el déficit de la Seguridad Social se ha reducido en un punto desde el año 2018.

En su intervención, la ministra recordó la revalorización con el IPC de las pensiones gracias a la reforma legal aprobada en varias fases durante la pasada legislatura, lo que dijo que da “certidumbre” a millones de españoles. Además, atribuyó a esta reforma legal el hecho de que el sistema de pensiones vaya a ser sostenible en el tiempo.

Como ejemplo, señaló que se ha recuperado el Fondo de Reserva, conocido como ‘hucha de las pensiones’, que hoy acumula más de 5.500 millones de euros. Este instrumento, pensado para que sirve de apoyo al sistema en momentos de tensión, alcanzará los 9.000 millones al término de este año y los 25.000 millones al final de la actual legislatura.

Asimismo, destacó que “el peso de las jubilaciones voluntariamente demoradas se ha duplicado” en 2023 frente a 2022. “Y todo ello mientras nuestros pensionistas ven cómo el poder adquisitivo de sus pensiones está garantizado a pesar de unos niveles elevados de inflación en los últimos dos años”, relató la ministra.

Entre los compromisos para esta legislatura, Saiz resaltó que el Ministerio está trabajando, de la mano de las organizaciones empresariales y sindicales, en el desarrollo de una nueva regulación de la compatibilidad entre trabajo y pensión. “Queremos favorecer la salida gradual y basada en la voluntariedad del mercado de trabajo. Sabemos mediante encuestas que hay trabajadores que quieren seguir trabajando más allá de la edad ordinaria, pero quieren hacerlo con unas condiciones que favorezcan su actividad”, sostuvo.

En paralelo, recordó que está trabjaando en la reforma de la jubilación anticipada en actividades penosas y peligrosas. Así, según detalló, “este nuevo procedimiento contará con indicadores objetivos para justificar dichas condiciones en las que se tendrán en cuenta factores como la incidencia, persistencia y duración de los procesos de baja laboral, así como las incapacidades permanentes o fallecimientos que se puedan causar”.

Por otra parte, Saiz sacó pecho del modo en el que se ha desarrollado el primer año (2023) de puesta en marcha del nuevo sistema de cotizaciones de autónomos, basado en cuotas en función de los ingresos reales. A su juicio, el “nuevo sistema se ha puesto en marcha, como se deben hacer este tipo de transformaciones, poco a poco, con periodos de transitoriedad, por si hace falta hacer ajustes”.

Al hilo, indicó que “el despliegue del nuevo sistema ha de continuar y antes de 2026 tendremos que concretar el ritmo hasta su plena operatividad en 2032”.