Durante la presentación de una campaña publicitaria de este organismo, Camps aseguró que la mejr manera para garantizar la viabilidad del actual sistema de Seguridad Social es la lucha contra el fraude y, especialmente, "en el uso abusivo de las prestaciones sociales".

En este sentido, se refirió a los esfuerzos realizados en el control de la Incapacidad Temporal. Como ejemplo, anunció que las prestaciones pagadas durante el año 2000 por este concepto ascendieron a 615.000 millones de pesetas, lo que supone apenas un 5,2% más que lo abonado por este mismo cargo en 1996.

Según explicó, estehecho pone de manifiesto el control sobre esta prestación, cuyo gasto se ha incrementado muy por debajo de la evolución de los salarios -uno de los componentes de su cálculo- y también muy por debajo del crecimiento del número de afiliados a la Seguridad Social en los últimos cinco años y, por lo tanto, de los posibles perceptores de la prestación.