El lehendakari José Antonio Ortega Lara dio lectura a un pronunciamiento conjunto de la Mesa de Ajuria Enea, que se reunió hoy con carácter extraordinario en Vitoria, en el que señala que ETA sabe que ha puesto condiciones imposibles de cumplir al amenazar con matar al concejal popular Miguel Angel Blanco si no son reagrupados en Euskadi los press de la banda terrorista antes de mañana a las cuatro de la tarde.

Ardanza, que dio dio lectura al comunicado en vasco y en castellano, señaló que "creíamos haber llegado al límite de la crueldad y la inhumanidad con que un ser humano puede tratar a otro ser humano" con el secuestro de 532 días de José Antonio Ortega Lara, pero "hoy descubrimos con espanto que la crueldad y la inhumanidad de ETA no tenían el límite que nosotros creíamos".

"Con el secuestro de Miguel Angel Blanco Garrido, acompañao de su condena a muerte a plazo fijo, ETA ha logrado superarse a si misma. Este nuevo acto criminal de ETA es algo mucho peor que un chantaje. ETA sabe de antemano que ha puesto unas condiciones imposibles de cumplir. Nos encontramos, por tanto, ante un acto cobarde, de venganza mafiosa, de auténtica vendetta, perpetrado por una organización desesperada y resentida que es incapaz de asumir sus derrotas y de sacar de ellas conclusiones políticas", añade el comunicado.

El lehendakari hizo un llamamient a la "inmensa mayoría" de los vascos para que no toleren "resignados y en silencio" este nuevo acto de inhumanidad terrorista, a cuyo fin convocó a toda la ciudadanía a participar mañana en Bilbao, a las doce del mediodía, en una gran manifestación por la libertad de Miguel Angel Blanco.

Ardanza recalcó que "no estamos convocado una manifestación política al uso, la manifestación que hoy convocamos es una manifestación de humanidad, una manifestación para defender la dignidad y el buen nombre de nuesro pueblo".

Añadió que "estando como está en peligro la vida de un ser humano, queremos que esta manifestación se convierta también en un ruego, en una súplica si se quiere, para que quienes tienen en sus manos el destino de Miguel Angel, es decir, sus secuestradores directos y quienes les apoyan desde Herri Batasuna, no traspasen este último límite y dejen a este hombre vivir en libertad. Este pueblo no ha perdido aún la esperanza. Que nadie se atreva a matarla en la persona de Miguel Angel".