EL SECTOR TURISTICO BALEAR CRITICA LA PASIVIDAD DEL GOBIERNO ANTE LOS RETRASOS POR LOS CONTROLADORES AEREOS FRANCESES
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La Asociación de Compañías Aéreas (AECA), agencias deviajes, la Federación de Asociaciones de Hoteleros y Fomento de Turismo de las Islas Baleares han exigido hoy en Palma de Mallorca una actuación dura y contundente del Gobierno español para solucionar el problema de los retrasos aéreos que vienen provocando cada fin de semana los controladores franceses.
El sector turístico balear acusa de una total pasividad al ministro de Transportes, José Borrell, y al de Turismo, Javier Gómez Navarro, al no mediar con el Gobierno francés en un problema que ha afecado ya a 400.000 pasajeros y que puede llevar al desastre a los aeropuertos del archipiélago durante este próximo fin de semana.
Fomento de Turismo está estudiando incluso la posibilidad de exigir indemnizaciones al Gobierno francés ante la avalancha de denuncias de turistas que durante el pasado fin de semana tuvieron que soportar hasta siete horas de retrasos en los vuelos con destino u origen en Palma de Mallorca.
El problema puede agravarse en los próximos días, ya que los controladores galosdecidirán mañana convocar una huelga general que tan sólo permitirá un vuelo internacional cada dos horas en el aeropuerto de Marsella, lo que paralizará los vuelos en Palma.
Juan José Hidalgo, presidente de la compañía aérea Spanair, indicó que "estamos dando un mal servicio y amargamos las vacaciones de nuestros clientes. Si es necesario, estamos dispuestos a aportar soluciones económicas a los controladores de Marsella para que no nos hundan el futuro de las islas".
Los controladores aéreos deMarsella han estado llevando a cabo los últimos días una huelga de celo, negándose a realizar horas extras porque no están de acuerdo con las retribuciones de las mismas.
Mañana los sindicatos galos negociarán con la emrpesa y si no se llega a un acuerdo irán a la huelga. Hidalgo asegura que no está en contra de los trabajadores, pero considera que "Eurocontrol cobra a Spanair 2.000 millones de pesetas al año para controlar el espacio aéreo europeo".
"Es un servicio que pagamos muy caro y no pued consentirse que unos cientos de trabajadores perjudiquen a cientos de miles de personas. Si no tienen trabajadores suficientes, que amplíen la plantilla", añadió.
En los próximos días, representantes del sector turístico balear se reunirán con el ministro Borrell, aunque la fecha no ha sido concretada. Entre las soluciones a corto plazo, los técnicos del aeropuerto de Palma apuntan la posibilidad de organizar un puente aéreo que desvíe el tráfico desde la capital mallorquina hacia algún centro de Eurpa y que permita el paso un avión cada dos minutos.
Esta es una solución que se ha aplicado ya en las líneas Londres-París y Londres-Bruselas con éxito. Sin embargo, a largo plazo, la única solución pasa por reorganizar el mapa aéreo europeo.
(SERVIMEDIA)
20 Jul 1994
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