Cabo manifestó a un grupo de periodistas en los pasillos del Palacio de Congresos que el PCE "debe tener una mediación ante la sociedad y unas relaciones internacionales propias", independientemente del aumento de soberanía que se conceda a Izquierda Unida (IU).

"Hasta hoy, las propuestas del sector mayortario son inaceptables", aseguró. "Si no hay acuerdo, no descartamos presentar una lista complementaria".

Por su parte, el representante de la corriente renovadora, Juan Berga, aseguró que plantearán una dura batalla para conseguir que en este XIII Congreso se aplique un acuerdo del anterior cónclave comunista, en el que se adoptó la incompatibilidad de cargos entre la secretaría general del PCE y la coordinación general de IU.

El líder del PCE, Julio Anguita, fue preguntado minutos antes de inicarse el Congreso si está todo decidido en esta reunión, a la vista del abultado respaldo -se cifra en un 80 por ciento- que obtendrá con toda probabilidad su informe de gestión, que defenderá hoy.

El dirigente comunista dijo que son los 745 delegados asistentes los que tendrán la última palabra y añadió que no es partidario de "vender la piel del oso antes de cazarlo".

Sobre la continuidad del enfrentamiento con el sector crítico, dijo que "estas contradicciones no tienen síntesis, porque se refiren a si el PCE continúa o no".